Parking Pizza cuenta ya con siete establecimientos, cinco en Barcelona y dos en Madrid. Tras petarlo con el primer Parking Pizza en la calle Londres y seguir después con el éxito en Passeig Sant Joan, Passatge de Marimon y Gran Vía en la Ciutat Comtal, ahora la familia Parking Pizza sigue creciendo y se le une un nuevo miembro en la calle València con Pau Claris, en pleno centro de la ciudad. Parking Pizza València sigue la línea de sus hermanos mayores y apuesta por lo industrial chic, el ambiente informal y la pizza con ingredientes de primera calidad, si bien cuenta con algunas diferencias significativas para redondear la experiencia gastronómica. ¿Lo vemos?  

El espacio, firmado por Skye Maunsell Studio, presenta una distribución diáfana y tiene 430 m2 y una capacidad para 85 comensales. Aquí se mantiene la organización tradicional tan típica de los Parking Pizza, con un espacio de aire industrial que se organiza a partir de mesas largas para compartir y taburetes de cartón con hueco para guardar nuestros enseres. Como novedad: un amplio espacio en la entrada que las noches de jueves a sábado funciona como zona de cocktails. Una zona que está separada de la cocina por una enorme cristalera que resalta el horno de leña tan típico de Parking Pizza.     

  Por lo que respecta a la carta, las pizzas, como no, continúan siendo las principales protagonistas. Pizzas con masa de fermentación napolitana con un punto crujiente junto con ingredientes italianos de máxima calidad se combinan con ingredientes locales para lograr mezclas de sabores delicadas y sabrosas. Nosotros escogimos una pizza blanca y una con tomate. La blanca con trufa negra, fontina, huevo y parmesano; y la con tomate con stracciatella y orégano fresco. También probamos algunas de las nuevas incorporaciones de la carta, como el vitello tonnato de solomillo con alcaparrones (delicioso), y en materia de antipasti añadimos la focaccia con romero, la bresaola con celeri y cáscara de lima rallada y el queso italiano Tomino del Boscaiolo al horno. Para rematar, un tiramisú casero finísimo y un affogato con helado artesanal de vainilla.  

  Con una ubicación inmejorable a solo unos metros de Paseo de Gracia, el nuevo parking Pizza València se convierte en un nuevo imperdible de la ciudad, tanto en el día como en la noche. Abierto a la calle con unos amplios ventanales nos permite disfrutar de mucha luz a la hora de comer y se transforma en un espacio íntimo y acogedor al caer la noche.