Subir las escaleras que te conducen hacia la terraza del Hotel Mandarín Oriental equivale a introducirte en un nuevo mundo de la mano de su Jardín Mimosa. Un embriagador aroma a lavanda y, como no, a mimosa invade de seguida tu olfato y a partir de aquí, sólo te toca disfrutar...

En este caso, la terraza del hotel no ocupa lo más alto del edificio, así que olvídate de deleitarte con unas vistas espectaculares de la ciudad. Ésta se sitúa en el típico patio interior de las manzanas del Eixample y este detalle que la hace diferente produce un aislamiento único y un relax absoluto.

Como podréis apreciar en las fotografías, se trata de un entorno único, donde predominan los grises y el verde, de un marcado estilo británico, alocado, aunque con un toque asiático, zen, de líneas rectas que controlan la frondosidad de la planta. A destacar también sus sillas y sillones, de diseño exclusivo y de comodidad absoluta.

Su carta va desde unos tés y unos smoothies hechos artesanalmente y con productos del día, hasta una cena informal con unas cuantas tapas con productos frescos de mercado. De este modo, por unos 8 euros puedes adentrarte en el Jardín Mimosa y por unos 25 puedes cenar compartiendo unas cuantas tapas en pareja o entre amigos.

El objetivo del Mandarín Oriental, tal y como nos comentó Ramón, el encargado de la terraza, es el de establecer precios lo más accesibles posibles para acercar el Jardín Mimosa a toda la ciudad, y no sólo a los clientes del hotel. De hecho, el Mandarín busca cambiar el concepto de hotel de lujo y por ello ha decidido bajar sus precios durante esta crisis. Ahora, por lo tanto, tienes una oportunidad inmejorable de disfrutar del lujo sea cual sea tu bolsillo.

Climbing the stairs that lead you to the terrace of the Hotel Mandarin Oriental means that you introduce to a new world by the hand of Mimosa Garden. A scent of lavender and, of course, also mimosa comes to your nose and from that point, you just enjoy playing... In this case, the terrace of the hotel does not occupy the top of the building, so forget about delight with spectacular views of the city. This characteristic is in the courtyard of the blocks of the Eixample and this detail is what makes its different isolation. It produces a unique and complete relaxation. As you can see at the pictures, this is a unique environment, dominated by gray and green, of a strong British style, crazy, but with an Asian twist, zen. Straight lines that control the thickness of the floor. Also take a look on their chairs and armchairs, design and absolute comfort. Its menu ranges from teas and handmade smoothies of fresh products, to a casual dinner with a few tapas. Thus, for about 8 euros you can delve into the Mimosa Garden and about 25 can share a few tapas dinner with a partner or friends. The aim of the Mandarin Oriental, as we said Ramon, the manager of the terrace, is to set prices as accessible as possible to bring the Mimosa Garden citywide, not just hotel guests. In fact, the Mandarin seeks to change the concept of luxury hotel and has therefore decided to lower their prices during this crisis. Now, therefore, have an excellent opportunity to luxuriate whatever your incomes are.